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ESPACIO APICOLA, 16 de noviembre de 2023) En lo que va de la temporada apícola en la
Argentina la miel de limón fue un fracaso en
Tucumán, al igual que en el
sudeste correntino donde el exceso de lluvias malogró la cosecha de miel. Por su parte, el
Monte Nativo Cordobés estuvo muy flojo en comparación a años anteriores.
Las escasez de lluvias y las fluctuaciones de la temperatura han retrasado la temporada en el resto del país entre 15 y 30 días, siendo muy gravitantes las bajas temperaturas mínimas en la
Pampa Húmeda,
Mendoza donde las temperaturas mínimas se situaron por debajo y en algunos casos muy por debajo de la media histórica que se ha establecido entre 1991 y 2020 como período de referencia para determinar las anomalias según el
Servicio Meteorológico Nacional en Argentina (SMN).
En lo que a humedad de suelo se refiere, la sequía de años anteriores se prolongó hasta septiembre y en un área significativa hasta octubre. Afortunadamente muchas hierbas de interés apícola brotan y florecen con el primer chaparrón, al menos donde no se esparce glifosato, aún así en muchas zonas hace falta lluvia para la producción de miel.
En el siguiente mapa del SMN se pueden apreciar a la izquierda las precipitaciones durante septiembre y octubre de 2023 y a la derecha la anomalía respecto a la media histórica. Sólo un arco en la zona de la
Mesopotamia, pintado de blanco, muestra normalidad en esa estrecha franja, luego hacia el noreste en toda loa provincia de
Corrientes y en
Misiones las precipitaciones estuvieron por encima de lo normal. El resto del país, coloreado de amarillo claro, oscuro y anaranjado muestra que el déficit general de precipitaciones en el arranque de la primavera estuvo en más de 50 mm y hasta 200 mm.
Ya en la primera decena de noviembre el fenómeno se revirtió en gran parte del territorio con mayor concentración de colmenas. En el siguiente mapa del SMN los registros de estos primeros diez días del mes muestran precipitaciones normales o apenas por sobre los valores normales, sin embargo éstas todavía no llegan a compensar el
stress hídrico ni satisfacer la demanda del perfil de suelo para la siembra de cualtivos de interés apícola como el girasol. Además la evapotranspiración provocada por el viento y ocasionales golpes de temperaturas altas no permiten apreciar un impacto significativo en la vegetación, pero se ha revertido la situación de meses anteriores en la zona central del país. Contrariamente, toda la franja costera del
Río Uruguay, en el límite con
Uruguay y
Brasil, desde la mitad de la provincia de
Entre Ríos hacia el norte, donde el nivel de precipitaciones venía siendo normal o superior a lo normal, está siendo muy perjudicada por el exceso de lluvias en este mes de noviembre.
Finalmente, lo que señalabamos al principio, en el siguiente mapa del SMN, nótese cómo las temperaturas mínimas de la primera decena de noviembre señaladas a la izquierda en grados Celcius, están de 2 a 3 grados centígrados por debajo de lo normal lo que sumado a un menor desarrollo vegetativo por el
stress hídrico, viene demorando el desarrollo de las colmenas.